La mayoría de los niños pueden escuchar sonidos tan pronto como nacen. Aprenden a hablar imitando los sonidos de su entorno, así como las voces de sus padres y de quienes los cuidan. No obstante, esto no les sucede a todos los niños. Muchos niños nacen con problemas auditivos en uno o ambos oídos. Otros incluso llegan a perder la audición por completo durante la niñez. Esto implica que los niños con problemas auditivos no adquieran el habla y el lenguaje como los niños con audición. Por ello, es muy importante detectar la sordera o la pérdida auditiva lo antes posible.
Tabla de contenidos
- ¿Cómo saber si mi bebé tiene problemas auditivos?
- ¿Cuándo se debe hacer una evaluación de audición?
- Causas de los problemas de audición en los bebés
- Síntomas para identificar los problemas de audición en bebés
- ¿Cómo se diagnostican los problemas de audición en los niños?
- ¿Se pueden evitar o prevenir los problemas de audición en los bebés?
- ¿Cómo se pueden tratar los problemas auditivos en los bebés?
- Vivir con problemas auditivos en bebés
¿Cómo saber si mi bebé tiene problemas auditivos?
Si tenemos un historial familiar con problemas auditivos, hace que el bebé tenga una mayor probabilidad de padecer sordera. En estos casos, hay que destacar que la audición del bebé se puede monitorizar por lo que si hay problemas auditivos se pueden tratar. Es muy importante detectar estos problemas de audición para que se trate lo antes posible.
En muchos hospitales antes de dar el alta hospitalaria, se realizan pruebas auditivas al recién nacido. Si en el centro no se le realiza ninguna prueba, es muy importante que a las tres primeras semanas de vida se le realicen pruebas auditivas.
Hay que tener en cuenta que aunque el bebé no pase las primeras pruebas de audición, no significa necesariamente que presente pérdidas auditivas. En estos casos, hay que tener un seguimiento controlado en los tres primeros meses de vida para confirmar la existencia de problemas auditivos. Si las siguientes pruebas terminan por confirmarlo, los médicos deben tratar estos problemas antes de que el niño cumpla seis meses.
Si el bebé pasa la primera prueba auditiva, hay que asegurarse de que oye bien. El bebé puede presentar un mayor riesgo de problemas auditivos porque:
- El bebé nació de forma prematura.
- Cuando nació estuvo en la unidad de cuidados intensivos de neonatología.
- Tuvo complicaciones al nacer.
- Padeció infecciones de oído, meningitis o el citomegalovirus.
¿Cuándo se debe hacer una evaluación de audición?
En muchos de los bebés que nacen con problemas de audición, se les puede realizar unas pruebas de audición para tener un diagnóstico. No obstante, en algunos casos, este problema se debe a traumas, infecciones o niveles de ruido perjudiciales, y el problema no se manifiesta hasta una etapa después de la niñez. Así pues, es importante hacer una evaluación de la audición de los niños a lo largo del crecimiento.
El bebé debe realizarse una prueba auditiva antes de salir del hospital o del centro de maternidad. En el caso de que no se lleven a cabo dichas pruebas, asegúrese de que durante el primer mes de vida, se evalúen. Detectar los posibles problemas de audición en el bebé dependerá de que se trate lo antes posible.
Si la primera prueba auditiva no sale positiva, no significa que tiene pérdida de audición. Puede ser a causa de restos o líquidos en el oído, por ello se suele repetir las pruebas para verificar los primeros diagnósticos. Para ello, es importante repetirla antes de los tres meses, para poder empezar un tratamiento de inmediato. Tratar estos problemas de audición antes de que el bebé cumpla los seis meses, implica que los resultados sean más favorables para nuestro bebé.
Aunque los bebés hayan superado las pruebas de audición satisfactoriamente, se le deben hacer evaluaciones desde los 4 años hasta cumplir los 18 años, incluso en cualquier otro momento si hay motivos de preocupación. Por otro lado, si su hijo parece tener problemas auditivos, es difícil entender lo que el niño dice porque el desarrollo del habla no parece normal, hable con el médico.
Causas de los problemas de audición en los bebés
Son muchas las cosas que pueden provocar problemas auditivos en los bebés, ya que algunos de ellos ya nacen con pérdidas de audición congénita. Los problemas auditivos que ocurren más adelante y derivan en la pérdida de audición se conoce como pérdida de audición adquirida.
Pérdida auditiva congénita
En ocasiones los médicos pueden identificar las causas que derivaron en la pérdida auditiva congénita, y en otras no. Este tipo de problema auditivo en los bebés puede ser o no genético (se da en familias).
Los padres pueden transmitir los problemas de audición a sus hijos. Los padres portan el gen recesivo de la pérdida auditiva, y por ende, lo transmiten. Por otro lado, uno de los padres también puede transmitir un síndrome genético (síndrome de Down, síndrome de Usher, etc.)
Las causas que no se deben a la genética suelen estar relacionadas con traumas o enfermedades antes o durante el parto. Las causas no genéticas más comunes son:
- Durante el embarazo, la madre tuvo infecciones tales como citomegalovirus, rubéola o virus del herpes simple.
- El bebé nació prematuramente.
- Diabetes materna.
- Consumo de drogas o alcohol durante el embarazo.
Pérdida auditiva adquirida
La pérdida auditiva adquirida puede aparecer en cualquier etapa de la vida de nuestro bebé. Por lo general, se debe a una lesión, infecciones o enfermedad. Algunas causas son:
- Infecciones constantes en los oídos.
- Ingesta de medicamentos que pueden dañar el oído, a su sistema auditivo.
- Exposición a ruidos fuertes durante mucho tiempo.
- Fluido en el oído medio.
- Orificio en el tímpano, es decir, tímpano perforado.
- Trauma grave en la cabeza.
- Infecciones y virus, como meningitis, encefalitis, varicela y sarampión.
Síntomas para identificar los problemas de audición en bebés
A pesar de que la prueba de audición del bebé sea satisfactoria, hay que seguir observando los posibles signos que indiquen que la audición es normal. Para identificar que su bebé no tiene problemas de audición debe alcanzar:
- Los bebés recién nacidos se asustan o se sobresaltan cuando escuchan ruidos fuertes y repentinos.
- A los tres meses de edad, un bebé generalmente reconoce la voz de sus padres.
- Antes de los seis meses, suele ser capaz de mirar o girar la cabeza hacia el lugar desde donde proviene un sonido.
- Es común que, a los 12 meses, el bebé pueda imitar algunos sonidos y decir algunas palabras como ‘’mamá’’ o ‘’adiós’’.
A medida que el bebé va creciendo hasta convertirse en un niño pequeño, los signos de pérdida de audición pueden incluir:
- Habla deficiente, falta de habla o dificultades en el habla.
- Déficit de atención frecuente.
- Limitaciones de aprendizaje
- Necesidad constante de subir el volumen del televisor, radio, etc.
- Ausencia de respuesta al nivel de ruido conversacional o respuesta inadecuada.
¿Cómo se diagnostican los problemas de audición en los niños?
Los bebés que nacen con problemas auditivos suelen ser diagnosticados mediante un examen de audición. Como hemos mencionado anteriormente, a todos los bebés se les debe realizar un examen de audición dentro del primer mes de vida. Si el bebé no tuvo un examen de audición, acuda a su médico para proceder de inmediato.
Hay varios métodos para diagnosticar la audición de un bebé, dependiendo de su desarrollo, estado de salud y etapa de vida.
- Pruebas de comportamiento: las pruebas de comportamiento implica la observación minuciosa de la respuesta conductual del bebé a los sonidos, el discurso calibrado y los tonos puros. Los tonos puros son diferentes frecuencias de los sonidos. A veces se emplean otras señales calibradas para adquirir la información sobre la frecuencia.
- Respuestas conductuales: cuando un recién nacido realiza movimientos oculares y mueve la cabeza en dirección del sonido, cuando un niño en edad preescolar sabe colocar las piezas de un juego y sabe levantar la mano.
- Respuestas habladas: incluye identificar una palabra en imágenes o la repetición de palabras a niveles suaves y cómodos. Los niños en edades muy tempranas son capaces de realizar pruebas de comportamientos.
¿Se pueden evitar o prevenir los problemas de audición en los bebés?
Dependiendo del tipo de problema auditivo, se puede o no tratar. En la mayoría de los tipos de pérdida auditiva congénita no se pueden prevenir (existen algunas excepciones). Los problemas auditivos en bebés causados por el consumo y abuso de drogas y alcohol durante el embarazo, se pueden evitar.
Se puede prevenir los problemas auditivos en bebé tomando una serie de precauciones:
- Tratar las infecciones de oído de forma correcta con prescripción médica.
- A medida que nuestro bebé crece, es inevitable que nuestro hijo practique actividades deportivas. Asegúrese de que siempre utilice un casco al ir en bicicleta o en patines para evitar traumatismos craneales.
- Mantenga a su bebé alejado de ruidos fuertes.
- Detectar los problemas de audición a una edad temprana.
¿Cómo se pueden tratar los problemas auditivos en los bebés?
Los problemas auditivos en los bebés pueden ser temporales o permanentes. La presión del oído medio, las infecciones de oído o los cambios en el líquido pueden provocar problemas auditivos temporales. Si se tratan, pueden desaparecer con el tiempo. Algunos problemas auditivos permanentes aparecen nada más nacer el bebé; pueden ser hereditarios (genética) o pueden ser originados por las intervenciones médicas. En otros casos, es posible que se desconozca la causa de los problemas de audición en el bebé.
Si su bebé tiene pérdida auditiva permanente, analice los posibles tratamientos con su médico. Existen dispositivos de audición aptos para niños, como los audífonos. El médico puede derivarlo a un audiólogo (un médico que se especializa en problemas de audición). Un audiólogo le ayudará a decidir qué audífono es el adecuado para su hijo. El audiólogo también puede aconsejarle sobre las posibles opciones para ayudar a su hijo con la comunicación; lectura de labios o lengua de signos.
Vivir con problemas auditivos en bebés
Esto puede significar que usted y su hijo necesiten aprender el lenguaje de señas. Es posible que su hijo necesite aprender a leer los labios. Sea flexible y paciente. Sepa que hay muchos profesionales que pueden ayudarlo a alcanzar los objetivos de comunicación para su hijo.
La pérdida auditiva varía de leve a grave. Hay muchas herramientas para ayudar a su hijo a escuchar. El tipo de pérdida auditiva que tenga determinará qué herramientas son efectivas. Si la pérdida auditiva de su bebé es de leve a moderada, un audífono puede ayudarlo a oír. De lo contrario, si su pérdida auditiva es grave, un implante coclear puede ser beneficioso. Señalar que un implante coclear no permite recuperar la audición, pero sí transmitir información acústica mediante la cóclea dañada directamente al nervio de la audición. Está diseñado para niños a los que los audífonos no son de utilidad.
Lo más importante es que, aunque su hijo tenga pérdida auditiva, pueda aprender a comunicarse. Esto significa que tanto los padres, familia y su hijo, necesitan aprender el lenguaje de señas. Por otro lado, muchos niños aprenden a leer los labios. Es un camino duro, por lo que hay que ser flexibles y sobre todo tener paciencia. En la actualidad hay muchos profesionales especializados en problemas de audición.